Escapada a Olot: Visitando las granjas lecheras

¡Hola!

En nuestra escapada a Olot pudimos visitar dos granjas de vacas lecheras, toda una experiencia para mi hija, hoy en día parece que la leche proviene de los bricks y está bien que los niños conozcan todo el proceso.

Visitamos muy temprano la granja Mas La Coromina en el pueblo de Joanetes, la Garrotxa (Cataluña). Muy cerca del Camping Lava donde estábamos alojados. Esta granja suministra la leche para la marca ATO, muy conocida en Cataluña.

Después de esperar a las demás familias que completarían la visita a la granja nos hablaron un poco de la historia de la granja y fuimos directos a ver animalitos. Primero pasamos por el huerto donde nos explicaron lo que tenían cosechado y el motivo, después pudimos coger conejos y acariciarlos. También pasamos por el corral para ver las gallinas.

Y seguidamente fuimos a ver las vacas. Las tienen separadas dependiendo si son jóvenes y aún no han tenido terneros, si están embarazadas, etc. Todo muy limpio y ordenado. Remarcar que Mas la Coromina (y todas las granjas que componen la marca ATO) tienen el certificado de bienestar animal, por lo que están acondicionadas al máximo para que las vacas estén confortables, limpias, sanas y más felices. Vaca feliz = a leche de más calidad.

Nos enseñaron la sala de ordeñar in situ, y nos quedamos sorprendidos del orden que llevan las vacas, ellas mismas se colocan y con paciencia van pasando por grupos. Mi hija tenía los ojos como platos viendo de donde venía la leche y como era el proceso para llegar a nuestras casas.

También tuvimos la oportunidad de darles de comer, fue muy divertido! Solo por lo que mi  hija disfrutó esa mañana ya me valió la pena todo el viaje. No quiso moverse de al lado de los terneros con días de vida, los acariciaba con tanta ternura...

Lo siguiente que hicimos fue lavarnos las manos, ojo que no en todos los lados te ofrecen lavarte las manos después de la visita a la granja, cosa que veo imprescindible. Y fuimos a un aula didáctica para explicarles a los mas peques la alimentación de las vacas y el proceso de la leche. Todo muy divertido con piezas de madera imantadas que se ponían en la pared.

Y por último, hicimos una cata de yogur natural y queso elaborado en la misma granja, todo riquísimo! Tuvimos la oportunidad de poder comprar lo que nos gustó y disfrutarlo en casa. Ah! y no olvidar que nos dieron un detalle al final de la visita que consistió en una bolsa, una taza y unos descuentos por si queríamos comprar leche.

En fin, una visita muy recomendable si estáis por los alrededores. Pasaréis un día rodeados de naturaleza, animales y alimentos saludables. Es imprescindible reservar la visita en su página web con bastante antelación, así que os aconsejo lo hagáis lo antes posible para no quedaros sin plaza.

¡Besitos!

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